Todos estos sistemas consisten esencialmente en: anclajes adecuados en base a la mampostería existente, ménsulas, montantes y en algunos casos corrientes o carriles horizontales aplicados directamente sobre la teja. Además del anclaje mecánico, este tipo de fachada incluye sistemas encolados o híbridos que, gracias a la continua investigación en el campo, han conseguido alcanzar y en algunos casos superar, los mismos estándares de calidad y resistencia que los sistemas mecánicos. Todos los sistemas propuestos por Italgraniti son resistentes a los agentes atmosféricos y una vez instalados no tienen prácticamente mantenimiento y garantizan la inspección de todo el sistema.